En una isla de orden con un volcán
"Seguir vivo es huir del equilibrio cuesta arriba sin dejar de resbalar cuesta abajo". Jorge Wagensberg. "Sólo se puede tener fe en la duda". La Señora Isabel salía todas las mañanas a barrer la puerta de su casa. Reunía con el cepillo todo lo que el tránsito había dejado durante las veinticuatro horas anteriores, lo ponía en el recogedor y volvía a entrar. Nada más cerrar la puerta, en la calle se empezaba a acumular lentamente todo aquello que Isabel barrería otra vez al día siguiente, tal y como venía haciendo desde hacía mucho tiempo. Era una labor que nunca terminaba porque nunca había un barrido definitivo. Porque nunca hay un barrido definitivo. De todos los estados que podía presentar la calle a la altura de su puerta, Isabel imponía uno, el de la limpieza. Podía haber barro, arena, hojas. Todo esto podía estar dispuesto en infinitas disposiciones, de esta forma o de la otra. De todos los estados posibles, que eran infinitos, a Isabel solo le gu...